Necesidades Innecesarias

“Tick tack, tick tack” Deprisa!! corren nuevos tiempos, tira lo que tienes entre las manos y busca lo nuevo…

Los tiempos modernos traen consigo tantas modas, tecnologías, comportamientos, ideas, artilugios, etc, que francamente me cuesta creer que algunas de estas cosas nos hagan ser dependientes, y pasen a ser consideradas como necesidades.

Vivimos en la sociedad de la inmediatez, del usar y tirar. Y como tontos, hacemos necesidades innecesarias. Lo que hoy nos place, mañana nos aburre. Lo que hoy está a la vanguardia mañana está obsoleto.

Mientras tanto vamos persiguiendo una sombra que nunca acaba sin darle importancia.

¿Hemos olvidados distinguir conceptos? ¿Es útil todo lo que consideras “necesario”?

La televisión ya no te ofrece entretenimiento, sino hace que te pegues al sofá mostrándote 30 canales, o más en algunos casos, para que dejes tu vida al margen.

Las cámaras de fotos digitales permiten hacer tantas fotos, que luego se acumulan realmente en cantidades prescindibles, y pierden el encanto de las fotos de antes.

Las descarga de música mp3, hace tan grande la oferta que multiplicas los discos y las canciones, pero luego solo oyes la mitad, o menos. La palabra “discografía” pierde sentido cuando solo oyes dos canciones.

Los programas de ordenador permiten mantener una relación con un desconocido, recorrer un museo desde tu casa, o leerte un libro mientras buscas el sueño.
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El GPS te lleva hasta el punto exacto sin permitir un recorrido interesante e intrigante viendo paisajes o curiosidades del camino.

El teléfono móvil tiene más trato que cualquier persona cercana y su número pasa a ser un segundo DNI para cualquiera

Los comercios ya no se esfuerzan para que acudas a su local, sino que son ellos los que te llevan la oferta directamente a casa o a tu correo electrónico. Porque comprar desde el sofá es menos “complicado”

El coche desplazado en un corto recorrido por ciudad, y su correspondiente busqueda desesperada de aparcamiento, en lugar de andar 15 minutos.

Las joyas, trajes, vestidos o zapatos que solo se usan una vez.

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¿Y la vida es más fácil? ¿Y tiene sentido? ¿Cuanto se gana con estas necesidades "satisfechas"?

Mientras tanto, mientras todo esto ocurre a nuestro alrededor, mientras algunas cosas pierden su valor y se buscan nuevas sensaciones, el reloj de pulsera, marca el “tick tack”, y se convierte en un post-it que advierte: “date prisa!!”